Un Dieciocho Memorable (2da Parte)
ADVERTIENCIA: Es necesario leer la primera parte para comprender los acontecimientos acaecidos.
Nos dirigimos a casa de Joshi en nuestro bólido azul, con nuestras pilchas dieciocheras recién compradas y con olor a nuevas, y una vez reunidos comenzamos el ascenso hacia el “Club Militar”.
Teníamos una vista espectacular que contemplaba todo Santiago y una mesa más grande que la de “Té Club”, pero redonda.
Le preguntamos al mozo si existía la posibilidad de cambiarnos a una mesa más chica ya que nos sobraba un buen espacio y aún teníamos las esperanzas de que aparecieran los guachupetos, pero esto no ocurrió.
Empezamos a animarnos ya que el lugar era espectacular, bien atendido, bonita vista, música chilena, y muy buenos precios.
Para variar teníamos un poquito de hambre así que comenzamos con la pedida que describo a continuación: 2 empanadas, 2 choripanes, 1 jarro de litro de chicha, 4 bebidas en lata, 1 parrillada, papas fritas, ensalada chilena, un vino tinto, 4 motes con huesillos, Orquesta incluida, música y bailoteo. Todo por $17.300, es decir $5.000 por persona propina incluida.
Luego de este pequeño cocktail, comenzó la orquesta a rendirle tributo a la música Chilena y lógicamente había que salir a mover el esqueleto y a sacarnos las telarañas que teníamos en el cuerpo luego de mucho tiempo sin bailar.
Como lo que se aprende bien no se olvida, después de una que otra cancioncita nos dejamos llevar por el memorable “galeón español”, “Un año más”, “La cachimba”, “Rafaela Carra” y tantos temas que nos llenaron de alegría y felicidad. Luego de una hora de baile ya estábamos haciendo coreografías y revolucionando el escenario, pocas veces lo habíamos pasado tan bien como en esta oportunidad. Ya eran casi las 3:00 de la madrugada y Joshi con la Claudia se pusieron cariñosos y querían pasar a unos lugares luminosos como, “Los arbolitos”, “Internacional”, “Continental”, etc, cosa que impedimos, así que nos retiramos a nuestros hogares a descansar.
Bueno, un lástima que no pudieran compartir con nosotros tan agradable velada, pero ya habrá una nueva oportunidad, ya que quedamos de repetir la experiencia en “Los Buenos Muchachos”, así que vamos poniendo fecha para que nos juntemos lo antes posible.
Nos dirigimos a casa de Joshi en nuestro bólido azul, con nuestras pilchas dieciocheras recién compradas y con olor a nuevas, y una vez reunidos comenzamos el ascenso hacia el “Club Militar”.
Teníamos una vista espectacular que contemplaba todo Santiago y una mesa más grande que la de “Té Club”, pero redonda.
Le preguntamos al mozo si existía la posibilidad de cambiarnos a una mesa más chica ya que nos sobraba un buen espacio y aún teníamos las esperanzas de que aparecieran los guachupetos, pero esto no ocurrió.
Empezamos a animarnos ya que el lugar era espectacular, bien atendido, bonita vista, música chilena, y muy buenos precios.
Para variar teníamos un poquito de hambre así que comenzamos con la pedida que describo a continuación: 2 empanadas, 2 choripanes, 1 jarro de litro de chicha, 4 bebidas en lata, 1 parrillada, papas fritas, ensalada chilena, un vino tinto, 4 motes con huesillos, Orquesta incluida, música y bailoteo. Todo por $17.300, es decir $5.000 por persona propina incluida.
Luego de este pequeño cocktail, comenzó la orquesta a rendirle tributo a la música Chilena y lógicamente había que salir a mover el esqueleto y a sacarnos las telarañas que teníamos en el cuerpo luego de mucho tiempo sin bailar.
Como lo que se aprende bien no se olvida, después de una que otra cancioncita nos dejamos llevar por el memorable “galeón español”, “Un año más”, “La cachimba”, “Rafaela Carra” y tantos temas que nos llenaron de alegría y felicidad. Luego de una hora de baile ya estábamos haciendo coreografías y revolucionando el escenario, pocas veces lo habíamos pasado tan bien como en esta oportunidad. Ya eran casi las 3:00 de la madrugada y Joshi con la Claudia se pusieron cariñosos y querían pasar a unos lugares luminosos como, “Los arbolitos”, “Internacional”, “Continental”, etc, cosa que impedimos, así que nos retiramos a nuestros hogares a descansar.
Bueno, un lástima que no pudieran compartir con nosotros tan agradable velada, pero ya habrá una nueva oportunidad, ya que quedamos de repetir la experiencia en “Los Buenos Muchachos”, así que vamos poniendo fecha para que nos juntemos lo antes posible.
2 Comments:
At 9/20/2005 10:00 a. m., Anónimo said…
En realidad fue una "velada" topisima la pasamos realmente bien bailamos mucho y Claudio mostró sus dotes de bailarin junto a la cancion " Mueve la Cachimba eh ... mueve la cachimba ah..." a pesar que faltaron comensales su presencia la sentimos en todo momento ya que los puestos desocupados no fueron ocupados ... bueno ojala se repita esto y no esperemos otro 18 para q nos juntemos !!!
Saludos a todos
Claudia de Joshi jijijiji
At 9/20/2005 7:20 p. m., Anónimo said…
Excelente blog chilimplon. Realmente los pasamos super bien. Quiero aclarar algo eso si, el que quería ver estrellitas en esos locales con tiritas a la entrada tipo carnicería (por algo le llaman matadero) eras tu con chilimplin, no nosotros.
Como dice el dicho, lo quitado y lo bailado no lo quita nadie.
Saludos y nos vemos
JL
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